Un proyecto deportivo y una existencia sana
En la ciudad de Badajoz, nos encontramos con un equipo de fútbol sala, el Camino a la Vida, que se encuentra totalmente comprometido con un programa de voluntariado para fomentar los hábitos saludables de los jóvenes en riesgo de exclusión social, apartándoles de malas prácticas sociales.
Con su proyecto están ayudando a una gran cantidad de jóvenes de la ciudad extremeña con el propósito de apartarles del consumo de sustancias estupefacientes o el juego a través de la práctica deportiva.
La Asociación benéfica ASC Camino a la Vida nació en 2016 para apartar a los chavales de las drogas, la ludopatía o, en general, cualquier tipo de adicción. Precisamente el juego es una de las que más preocupa en la actualidad, según describe su presidente Julián Cruz Zambrano, 'Premio al Voluntariado' de la Junta de Extremadura. El proyecto prosigue en esta temporada 2019/20 con su buque insignia, su equipo de fútbol sala de Tercera División.
Un club que está presentando estos días en sus redes sociales el nuevo proyecto, que incluye la creación este curso de la escuela para la cantera, enfocada a las categorías de benjamines, alevines, infantiles cadetes y el juvenil, que es filial del equipo de Tercera. Próximamente se espera contar con un prebenjamín un equipo femenino. Todos con el mismo propósito de practicar deporte, convivir y la negativa a las adicciones. Todos los niños tendrán equipación, viajarán en autobús a las competiciones Judex, ficha federativa y seguro médico. La entidad extremeña intenta cerrar un acuerdo con el InterMovistar madrileño, campeón de España, Europa y del mundo. Se trataría de un acuerdo de afiliación para que los jugadores punteros prueben en el mencionado coloso y lo conozcan.
Por último, el Camino a la Vida informa de que realiza una campaña de captación de jugadores en colegios, instalaciones deportivas, empresas, etc., con la idea de que cuantos más chavales se unan al proyecto mejor. Un proyecto que merece la pena y va más allá del deporte.